Figueroa, uno de los 3 Mosqueteros de la política nacional, tira la toalla

El actual Ministro de Seguridad y Justicia, Don René Figueroa, uno de los tres hombres fuertes de la política nacional, tira la toalla de la Vicepresidencia de Ideología del COENA, órgano ejecutivo dentro del partido ARENA. Así lo anunció el propio Ministro a los medios de comunicación esta mañana (por ayer) de hoy martes 3 de junio de 2008. (Foto: LPG)

Por atrás, casi por sorpresa o no, el amigo de Rodrigo Ávila, Ricardo Martínez, es quien recoge la toalla del segundo puesto más importante en ARENA, la Vicepresidencia de Ideología, con lo que el hasta ahora desconocido logra avanzar varios escalafones de un golpe en la empinada carrera política dentro del partido ARENA.

Luis Mario Rodríguez, quien todavía no tiene rango de hombre fuerte en ARENA, de momento aspira con fuerza a ello, había dado a entender que podríamos ver cambios de fondo al interior del COENA en el programa de Pencho y Aida en la 102.9.

Luis Mario no detalló a propuesta de quién se harían los cambios, de momento todo parece indicar que es otro golpe de palanca diseñado y llevado acabo por sabe dios quien, podría ser por el propio trío: Tony Saca, Rene Figueroa y Cesar Funes, los tres hombres que, hasta ahora, han controlado a destajo las riendas del gobierno central y por esta condición también buena parte del entramado institucional del estado y también el partido ARENA.

Hasta ahora, sin la avenencia de estos Tres Mosqueteros, aquí no se movía nada. Parece que la cosa podría estar tomando un nuevo giro.

Sin embargo, no querríamos pensar que la reingeniería corre toda por cuenta del ingeniero Rodrigo Ávila, pues él lleva muy poco tiempo en los cargos de candidato a la Presidencia de la República y presidente del COENA y no parece de momento conocer a fondo, por lo menos todavía no, las palancas y los botones del cuadro de mandos que tiene enfrente, para el cual no hay manual de instrucciones, sino un simple aprendizaje que se va desarrollando sobre la marcha.

Sería muy aventurado de su parte empezar hacer ajustes drásticos sin que todavía sepa muy bien como funcionan los resortes del cuadro de mando del COENA y del Estado. Vale aclarar que esto no tiene ningún fundamento científico, por el contrario, se sustenta en la base de la opinión más subjetiva.

Lo que sí parece tener una base más objetiva es el raquítico rendimiento que está cosechando Ávila en las encuestas, no están como para tirar cuetes, sino todo lo contrario, incluso se rumorea, en ese reducido y cerrado mundillo del poder económico y mediático del país, que podría ser relevado del puesto antes de resbalarse al vacío y perder unas elecciones presidenciales en el 2009 frente al eterno rival, el FMLN, un lujo democrático en nuestro país que la derecha salvadoreña no está dispuesta a permitir así como así. Esta es otra de las razones por las que Ávila no se atrevería hacer cambios de fondo en el COENA por su cuenta. Su liderazgo no termina de consolidarse en la calle.

De momento la jugada es como mínimo inesperada ya que el Sr. Figueroa siempre fue un incondicional absoluto del partido, una especie de animal político incansable que siempre se entregó por completo al progreso y al avance de su formación partidista y al hundimiento total de la formación partidista del adversario.

Sin embargo, la decisión, quizás, se deba a un intento de Figueroa, con el beneplácito de los otros dos Mosqueteros, Saca y Funes, de trasladarse hacia los dominios de la campaña de Ávila y así intentar controlar un poco las cosas y neutralizar cualquier eventual escapada en solitario de Ávila y su equipo de campaña comandado por el hombre conocedor de los callejones y pasadizos secretos de Washington, el Sr. René León, que ya está “manos a la obra” en El Salvador y que, según las malas lenguas, no está dentro del pequeño círculo de confianza del Presidente Saca, esa potente argolla dorada coordinada por el Sr. Hebert Saca, familiar y socio del propio Presidente.

El Embajador León ha dicho abiertamente que este país necesita “reinventarse” en su forma de gestionar la cosa pública. Pero esa palabrita tan innovadora como desafiante para la clase política actual del país no gusta mucho al Presidente Saca ni a los que forman su círculo de confianza porque presupone que hasta ahora los responsables del Gobierno, y por tanto de ARENA, no se han “recreado” o “reinventado” en la gestión pública y para el Presidente Saca, si ha habido un derroche en su mandato, no ha sido precisamente en el gasto de la publicidad institucional sino en la “creatividad” y “reinvención” con las que el gobierno ha revolucionado el área de “lo social” y el crédito naturalmente le corresponde a él, tal como lo dijo en el informe a la nación de su 4º aniversario en el poder.

Estaremos pendientes de lo que ocurra. De momento, el diseño del gran plan de nación parece estar deslizándose del control de los 3 Mosqueteros que hemos tenido estos últimos 4 años, Saca, Figueroa y Funes.

Veremos si el hombre que apareció tantas veces en las pantallas de nuestros televisores en esa escena casi hollywoodezca, con la pistola en mano y chalecos antibalas, tumbando puertas y destartalando muebles en las guaridas urbanas, aprendiendo a mareros, bandidos y demás calaña, es capaz de imponer su estilo y su propia voluntad para rescatar de la amenaza del descalabro a una ARENA necesitada de aires nuevos y debilitada en las encuestas.

©Salvadoreños en el Mundo

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