Brasil confirma que los restos de fuselaje hallados en el Atlántico son del Airbus desaparecido
El ministro brasileño de Defensa, Nelson Azevedo Jobim, confirmó este martes que "no hay duda" de que los restos metálicos y asientos de avión avistados por la fuerza aérea de su país a unos 650 kilómetros del archipiélago de Fernando de Noronha, al noreste de Brasil, son del Airbus 330 desaparecido con 228 personas a bordo cuando viajaba de Río de Janeiro a París la noche del pasado domingo (madrugada del lunes en España). "No hay la menor duda de que son del avión de Air France", afirmó Jobim en una rueda de prensa en Río de Janeiro después de visitar en un hotel a los familiares de los 58 brasileños que viajaban en la aeronave.
Barcos de la Marina de Brasil se dirigen ahora al área del océano indicada por los pilotos para recoger los restos. Según el ministro, la mayor dificultad será encontrar las cajas negras del aparato.
Según expertos de la fuerza aérea brasileña, el lugar donde ha aparecido el fuselaje demuestra que el comandante trató de volver a la base aérea de Fernando de Noronha, ya que es una zona que se desvía a la derecha de la ruta seguida por los aviones que vuelan de Brasil a Europa, informa Juan Arias desde Río de Janeiro.
La tragedia aérea, que tiene en vilo a los familiares de las personas que viajaban a bordo, apuntó desde el primer momento a un triste final. Las esperanzas de hallar supervivientes son prácticamente nulas, tal y como aseguró el lunes el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Desaparición en la madrugada
El avión partió de Río de Janeiro a las siete de la tarde del domingo (medianoche en la España peninsular). Se comunicó por última vez con los controladores de Brasil tres horas y media más tarde cuando informaron de que entrarían en el espacio aéreo de Senegal. El comandante avisó de que entraban en una zona de turbulencias. El vuelo AF447 tenía que haber aterrizado en el aeropuerto de Charles Gaulle a las 11.10 hora francesa (9.10 GMT). Pero ya no se supo nada más.
En mitad del trayecto, sobrevolando el Atlántico, el aparato comenzó a emitir señales automáticas que informaban de diversas averías, entre las que se contaba un fallo eléctrico general. A las 2.14 de la madrugada (4.14 hora peninsular) desapareció en plena tormenta. Los responsables de Air France aseguraron que la causa posible del accidente es un rayo que, al alcanzar el avión, desencadenó un fallo en serie de todo el sistema. Pero nada es seguro. La desaparición del avión sin una señal de alerta complica la investigación.
Una vez fuera del alcance del radar, el Airbus 330 pudo precipitarse en una zona situada a unos 1.100 kilómetros de la costa de Brasil, donde la profundidad de las aguas del Atlántico oscila entre los 1.600 y los 4.000 metros.
Amplio dispositivo
A la busca de pistas, Brasil movilizó el lunes ocho aeronaves y tres navíos para rastrean el área que corresponde al control aéreo brasileño, mientras que varios aviones franceses hacían lo mismo en la zona bajo control aéreo de Dakar.
El presidente de EE UU, Barack Obama, ofreció ayudar con lo sea "necesario" para encontrar el avión desparecido. El Pentágono colabora desde el lunes con información procedente de sus satélites. España envió dos aviones que tiene en la base de Senegal.
En el aeropuerto internacional de Río de Janeiro Antonio Carlos Jobim y en el Charles Gaulle reina la angustia. Los familiares esperan con dolor y lágrimas la llegada de noticias. Padres, hermanos, novios y amigos saben que las esperanzas de encontrar supervivientes son muy escasas, casi nulas.
La relación completa de pasajeros por nacionalidades es la siguiente: 61 franceses, 58 brasileños, 26 alemanes, 9 chinos, 9 italianos, 5 británicos, 6 suizos, 5 libaneses, 4 húngaros, 3 eslovacos, 3 noruegos, 3 irlandeses, 2 estadounidenses, 2 españoles, 2 marroquíes y 2 polacos. La lista se completa con un ciudadano de cada uno de los siguientes países: Suráfrica, Argentina, Austria, Bélgica, Canadá, Croacia, Dinamarca, Islandia, Estonia, Gambia, Holanda, Filipinas, Rumanía, Rusia, Suecia y Turquía.
Fuente: Associated Press 3/6/2009
Barcos de la Marina de Brasil se dirigen ahora al área del océano indicada por los pilotos para recoger los restos. Según el ministro, la mayor dificultad será encontrar las cajas negras del aparato.
Según expertos de la fuerza aérea brasileña, el lugar donde ha aparecido el fuselaje demuestra que el comandante trató de volver a la base aérea de Fernando de Noronha, ya que es una zona que se desvía a la derecha de la ruta seguida por los aviones que vuelan de Brasil a Europa, informa Juan Arias desde Río de Janeiro.
La tragedia aérea, que tiene en vilo a los familiares de las personas que viajaban a bordo, apuntó desde el primer momento a un triste final. Las esperanzas de hallar supervivientes son prácticamente nulas, tal y como aseguró el lunes el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Desaparición en la madrugada
El avión partió de Río de Janeiro a las siete de la tarde del domingo (medianoche en la España peninsular). Se comunicó por última vez con los controladores de Brasil tres horas y media más tarde cuando informaron de que entrarían en el espacio aéreo de Senegal. El comandante avisó de que entraban en una zona de turbulencias. El vuelo AF447 tenía que haber aterrizado en el aeropuerto de Charles Gaulle a las 11.10 hora francesa (9.10 GMT). Pero ya no se supo nada más.
En mitad del trayecto, sobrevolando el Atlántico, el aparato comenzó a emitir señales automáticas que informaban de diversas averías, entre las que se contaba un fallo eléctrico general. A las 2.14 de la madrugada (4.14 hora peninsular) desapareció en plena tormenta. Los responsables de Air France aseguraron que la causa posible del accidente es un rayo que, al alcanzar el avión, desencadenó un fallo en serie de todo el sistema. Pero nada es seguro. La desaparición del avión sin una señal de alerta complica la investigación.
Una vez fuera del alcance del radar, el Airbus 330 pudo precipitarse en una zona situada a unos 1.100 kilómetros de la costa de Brasil, donde la profundidad de las aguas del Atlántico oscila entre los 1.600 y los 4.000 metros.
Amplio dispositivo
A la busca de pistas, Brasil movilizó el lunes ocho aeronaves y tres navíos para rastrean el área que corresponde al control aéreo brasileño, mientras que varios aviones franceses hacían lo mismo en la zona bajo control aéreo de Dakar.
El presidente de EE UU, Barack Obama, ofreció ayudar con lo sea "necesario" para encontrar el avión desparecido. El Pentágono colabora desde el lunes con información procedente de sus satélites. España envió dos aviones que tiene en la base de Senegal.
En el aeropuerto internacional de Río de Janeiro Antonio Carlos Jobim y en el Charles Gaulle reina la angustia. Los familiares esperan con dolor y lágrimas la llegada de noticias. Padres, hermanos, novios y amigos saben que las esperanzas de encontrar supervivientes son muy escasas, casi nulas.
La relación completa de pasajeros por nacionalidades es la siguiente: 61 franceses, 58 brasileños, 26 alemanes, 9 chinos, 9 italianos, 5 británicos, 6 suizos, 5 libaneses, 4 húngaros, 3 eslovacos, 3 noruegos, 3 irlandeses, 2 estadounidenses, 2 españoles, 2 marroquíes y 2 polacos. La lista se completa con un ciudadano de cada uno de los siguientes países: Suráfrica, Argentina, Austria, Bélgica, Canadá, Croacia, Dinamarca, Islandia, Estonia, Gambia, Holanda, Filipinas, Rumanía, Rusia, Suecia y Turquía.
Fuente: Associated Press 3/6/2009
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Internacional
Nuestro sentido pesame hacia los familiares que perdieron la vida en este tragico accidente.
ReplyDeleteJose Matatias Delgado Y Del Hambre.