Cambios en el sistema de transporte y salud pública
CAMBIOS EN EL TRANSPORTE PRIVADO COLECTIVO Y LA SALUD RESPIRATORIA
¿SERÁN POSIBLES?
Por Julio Alfredo Osegueda, DM.
La esperanza venció al miedo y el FMLN y Mauricio Funes abren una nueva etapa en la historia salvadoreña. Por primera vez, un instituto político de izquierda logra ganar las elecciones presidenciales y conducir parcialmente el poder ejecutivo. Si bien es cierto, que el panorama nacional es sombrío y el contexto internacional poco favorable, por la despiadada explotación de los recursos naturales, provocando agotamiento acelerado del petróleo, agua, alimentos y minerales.
A la luz de la crisis nacional y su relación directa con la internacional, es necesaria una política global de rescate paulatino del patrimonio nacional, formando bloques económicos que favorezcan el mercado nacional, revisión de “tratados de libre comercio” protección de la producción nacional consecuente, reforma tributaria, búsqueda y eliminación del contrabando, evasión de impuestos y elusión fiscal.
La población salvadoreña votó por cambiar su calidad de vida, no obstante esa voluntad popular no se materializa; la derecha salvadoreña se resiste al cambio y trata de mantener el modelo neoliberal, a pesar de su derrumbe nacional e internacional. Esa des-ubicación histórica al igual que el “FARO” en la época del Coronel Arturo Armando Molina, ha provocado un resquebrajamiento del partido arena y la fuga masiva de más de 12 parlamentarios y varios dirigentes regionales; situación que cambia coyunturalmente la correlación política legislativa y la posible muerte prematura de ese instituto de nefasta derecha.
En ese contexto nacional, el transporte privado colectivo; porque nunca, óigase bien...! en El Salvador ha sido PÚBLICO; este transporte, se ha caracterizado, por más de treinta años, en un servicio que ha beneficiado a grupos privilegiados de empresarios, los cuales han despreciado y humillado a la población, ofreciendo un servicio pésimo en calidad e irrespeto a los usuarios.
Todo este desprecio ha sido fomentado por las instituciones nacionales dirigidas hasta mayo del 2009 por arena. El Ministerio de Obras Públicas y el Vice Ministerio de Transporte, han sido cómplices en la adjudicación ilegal de permisos de líneas para transporte de autobuses, microbuses y pick ups, vehículos en malas condiciones en su carrocería, motor, caja de velocidades, sistema hidráulico de frenos, sistema de luces y llantas en malas condiciones y, lo más dañino para la salud respiratoria de los salvadoreños, un sistema de combustión con bombas de inyección, enemigas de la salud de los niños y niñas; que contamina vorazmente el medio ambiente y favorece la incidencia creciente de enfermedades respiratorias endémicas y epidémicas.
Hasta esta fecha, 31 de octubre del 2009, no existe una evaluación y monitoreo de la calidad y calidez del servicio de transporte colectivo privado. Los empresarios del sistema de transporte colectivo privado, han enquistado peones estratégicos en la Asamblea Legislativa y en otras instancias no gubernamentales para no pagar la deuda histórica de esquelas, evasión y elusión sistemática de impuestos, al igual que la mayoría de empresarios de la asociación de la empresa privada. ¿Donde esta esa Responsabilidad Social Empresarial, RSE? Que tanto publicitan en los medios de comunicación masiva, radio, prensa y televisión; ¿Porque no hay sensibilidad social en la Empresa de Transporte Privada Salvadoreña?
¿En que están invirtiendo el subsidio otorgado por el gobierno?, si los vehículos del transporte colectivos y sus tripulantes; siguen siendo una alta amenaza para la seguridad vial de sus usuarios, permanente irrespeto en el trato diario y ausencia de mantenimiento preventivo y corrección de las fallas mecánicas; motoristas sin licencia para conducir y cobradores sin permisos para ejercer ese trabajo y la mayoría bajo efectos de sustancias estimulantes, con uso excesivo de volumen en los aparatos eléctricos instalados para “comodidad de sus usuarios”.
Parece que existe una parálisis cerebral del sistema integral de prevención del gobierno salvadoreño para evitar accidentes de transito y el control de emisión de gases; que enlutan diariamente a la familia trabajadora y que aumenta la incidencia de enfermedades respiratoria, por las nubes de humo negro que emanan de las unidades de transporte colectivo privado.
La contaminación desmedida de bioxido de carbono CO2, en las vías publicas de la ciudad y el campo ha incrementado las enfermedades respiratorias y en esta ocasión, al analizar el perfil epidemiológico de los últimos 50 años, El Salvador, sigue teniendo, en las primeras diez causas de enfermedad, las infecciones respiratorias agudas y crónicas; Rinofaringitis Virales, Alérgicas y entre las crónicas la Tuberculosis Pulmonar; las cuales se exacerban con la contaminación ambiental del Transporte Colectivo Privado, y esta situación de contaminación implica que el sistema nacional de salud; invierta más recurso para que el trabajo de los médicos generales, neumólogos y cirujanos toráxicos, ofrezca la mejor asistencia curativa a las personas que presentan problemas respiratorios. Si hubiese responsabilidad social empresarial, muchos de estos problemas respiratorios se podría evitar; con una contribución preventiva de las empresas de transporte colectivo; teniendo un plan de mantenimiento preventivo y correctivo de sus vehículos.
El gremio medico y el sistema nacional de salud, tiene como primordial responsabilidad, FRENTE, a la sociedad y ante nosotros mismos y esta responsabilidad se asume con normas técnicas y morales idóneas y con un esfuerzo en la gestión más eficiente de los recursos disponibles.
Junto a este fundamental nivel, asistencial, no son menos importante, otros, la investigación continua y en forma conjunta por los Ministerios involucrados en la temática de la contaminación ambiental, transporte, salud, seguridad social, educación, derechos humanos y otros.
La crisis económica, energética y alimentaría, exige el mejor uso de lo que sabemos y de lo que incorporamos en el aprendizaje diario; la investigación operativa, nos dará la clave para el avance de los utópicos cambios, tan anhelados por: Don Lencho, Don Tiburcio, Doña Juanita, La Tulita Quech..! Y la memoria histórica del personal de salud que cayó en la lucha; médicas, médicos, enfermeras, promotores empíricos de salud.
Hoy, como ayer y mañana como siempre, seguiremos luchando por un sistema nacional de salud incluyente.
Julio Alfredo Oseguera es médico colaborador columnista de Salvadoreños en el Mundo
¿SERÁN POSIBLES?
Por Julio Alfredo Osegueda, DM.
La esperanza venció al miedo y el FMLN y Mauricio Funes abren una nueva etapa en la historia salvadoreña. Por primera vez, un instituto político de izquierda logra ganar las elecciones presidenciales y conducir parcialmente el poder ejecutivo. Si bien es cierto, que el panorama nacional es sombrío y el contexto internacional poco favorable, por la despiadada explotación de los recursos naturales, provocando agotamiento acelerado del petróleo, agua, alimentos y minerales.
A la luz de la crisis nacional y su relación directa con la internacional, es necesaria una política global de rescate paulatino del patrimonio nacional, formando bloques económicos que favorezcan el mercado nacional, revisión de “tratados de libre comercio” protección de la producción nacional consecuente, reforma tributaria, búsqueda y eliminación del contrabando, evasión de impuestos y elusión fiscal.
La población salvadoreña votó por cambiar su calidad de vida, no obstante esa voluntad popular no se materializa; la derecha salvadoreña se resiste al cambio y trata de mantener el modelo neoliberal, a pesar de su derrumbe nacional e internacional. Esa des-ubicación histórica al igual que el “FARO” en la época del Coronel Arturo Armando Molina, ha provocado un resquebrajamiento del partido arena y la fuga masiva de más de 12 parlamentarios y varios dirigentes regionales; situación que cambia coyunturalmente la correlación política legislativa y la posible muerte prematura de ese instituto de nefasta derecha.
En ese contexto nacional, el transporte privado colectivo; porque nunca, óigase bien...! en El Salvador ha sido PÚBLICO; este transporte, se ha caracterizado, por más de treinta años, en un servicio que ha beneficiado a grupos privilegiados de empresarios, los cuales han despreciado y humillado a la población, ofreciendo un servicio pésimo en calidad e irrespeto a los usuarios.
Todo este desprecio ha sido fomentado por las instituciones nacionales dirigidas hasta mayo del 2009 por arena. El Ministerio de Obras Públicas y el Vice Ministerio de Transporte, han sido cómplices en la adjudicación ilegal de permisos de líneas para transporte de autobuses, microbuses y pick ups, vehículos en malas condiciones en su carrocería, motor, caja de velocidades, sistema hidráulico de frenos, sistema de luces y llantas en malas condiciones y, lo más dañino para la salud respiratoria de los salvadoreños, un sistema de combustión con bombas de inyección, enemigas de la salud de los niños y niñas; que contamina vorazmente el medio ambiente y favorece la incidencia creciente de enfermedades respiratorias endémicas y epidémicas.
Hasta esta fecha, 31 de octubre del 2009, no existe una evaluación y monitoreo de la calidad y calidez del servicio de transporte colectivo privado. Los empresarios del sistema de transporte colectivo privado, han enquistado peones estratégicos en la Asamblea Legislativa y en otras instancias no gubernamentales para no pagar la deuda histórica de esquelas, evasión y elusión sistemática de impuestos, al igual que la mayoría de empresarios de la asociación de la empresa privada. ¿Donde esta esa Responsabilidad Social Empresarial, RSE? Que tanto publicitan en los medios de comunicación masiva, radio, prensa y televisión; ¿Porque no hay sensibilidad social en la Empresa de Transporte Privada Salvadoreña?
¿En que están invirtiendo el subsidio otorgado por el gobierno?, si los vehículos del transporte colectivos y sus tripulantes; siguen siendo una alta amenaza para la seguridad vial de sus usuarios, permanente irrespeto en el trato diario y ausencia de mantenimiento preventivo y corrección de las fallas mecánicas; motoristas sin licencia para conducir y cobradores sin permisos para ejercer ese trabajo y la mayoría bajo efectos de sustancias estimulantes, con uso excesivo de volumen en los aparatos eléctricos instalados para “comodidad de sus usuarios”.
Parece que existe una parálisis cerebral del sistema integral de prevención del gobierno salvadoreño para evitar accidentes de transito y el control de emisión de gases; que enlutan diariamente a la familia trabajadora y que aumenta la incidencia de enfermedades respiratoria, por las nubes de humo negro que emanan de las unidades de transporte colectivo privado.
La contaminación desmedida de bioxido de carbono CO2, en las vías publicas de la ciudad y el campo ha incrementado las enfermedades respiratorias y en esta ocasión, al analizar el perfil epidemiológico de los últimos 50 años, El Salvador, sigue teniendo, en las primeras diez causas de enfermedad, las infecciones respiratorias agudas y crónicas; Rinofaringitis Virales, Alérgicas y entre las crónicas la Tuberculosis Pulmonar; las cuales se exacerban con la contaminación ambiental del Transporte Colectivo Privado, y esta situación de contaminación implica que el sistema nacional de salud; invierta más recurso para que el trabajo de los médicos generales, neumólogos y cirujanos toráxicos, ofrezca la mejor asistencia curativa a las personas que presentan problemas respiratorios. Si hubiese responsabilidad social empresarial, muchos de estos problemas respiratorios se podría evitar; con una contribución preventiva de las empresas de transporte colectivo; teniendo un plan de mantenimiento preventivo y correctivo de sus vehículos.
El gremio medico y el sistema nacional de salud, tiene como primordial responsabilidad, FRENTE, a la sociedad y ante nosotros mismos y esta responsabilidad se asume con normas técnicas y morales idóneas y con un esfuerzo en la gestión más eficiente de los recursos disponibles.
Junto a este fundamental nivel, asistencial, no son menos importante, otros, la investigación continua y en forma conjunta por los Ministerios involucrados en la temática de la contaminación ambiental, transporte, salud, seguridad social, educación, derechos humanos y otros.
La crisis económica, energética y alimentaría, exige el mejor uso de lo que sabemos y de lo que incorporamos en el aprendizaje diario; la investigación operativa, nos dará la clave para el avance de los utópicos cambios, tan anhelados por: Don Lencho, Don Tiburcio, Doña Juanita, La Tulita Quech..! Y la memoria histórica del personal de salud que cayó en la lucha; médicas, médicos, enfermeras, promotores empíricos de salud.
Hoy, como ayer y mañana como siempre, seguiremos luchando por un sistema nacional de salud incluyente.
Julio Alfredo Oseguera es médico colaborador columnista de Salvadoreños en el Mundo
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Salud
Amigo Julio Los cambios no vendran.
ReplyDeleteNO LLEVO CEPILLOS NI BROCHAS!
ReplyDeleteHAY QUE PONER EN SU LUGAR A LOS TRANSPORTISTAS!
LOS SALVAS NO SON GANADO QUE LLEVAN DE UN LUGAR A OTRO!!
YO PIENSO QUE NI MUCHO MENOS UN VAQUERO LLEVARIA SUS VACAS EN UN CAMION CON VARANDAS ROTAS!!
LOS SALVAS NO PUEDEN SER TRATADOS DE ESA MANERA SON MILES DE MILES DE PERSONAS QUE USAN EL TRANSPORTE PUBLICO PRIVADO EN MALAS CONDICIONES!!
MOTORISTAS DE GOMA, MOTORISTAS QUE PIENSAN QUE EL AUTOBUS ES UNA DICOMOVIL!!
MOTORISTAS QUE PIESAN QUE LOS SALVAS SON GANADO DE TRANSPORTAR DE UNA HACIENDA A OTRA!!
DEBEMOS HACER DESAPARECER ESTA CULTURA MEDIOCRE!!
A mi me parece mas que urgente, es una grito de desespero de hay que regularizar el transporte porque en ese sector hay mucha sangre inocente de por medio del pueblo Salvadoreno.
ReplyDeletePorque no nacionalizar el transporte con un margen de participacion privada en el pais?
Asi funcionan en grandes urbes del mundo el transporte colectivo, porque no el pais?
Con la nueva conformacion de la Asamblea Legislativa a lo mejor los cambios seran mas substanciales hacia la atencion de la demanda ciudadana del transporte.
BUENO SERIA UNA UNIFORMIDAD DE BUSSES EN BUEN ESTADO CON UN CODIGO DE MANTENIMIENTO Y SEGURIDAD EN CADA UNIDAD DE TRANSPORTE.
UN BUEN HORARIO DE SALIDA Y LLEGADA EN COMBINACION DE OTRAS RUTAS.
CONDUCTORES BIEN ENTRENADOS A NIVEL ACADEMICO Y LA DESCONTINUACION DE COBRADORES DE MAL GUSTO QUE AMENAZAN LA POBLACION.
NUEVA DELINEACION DE RUTAS ACCESIBLES QUE DEMANDAN LOS PASAJEROS DE ZONAS TAN DISTANTES.
LA DEMANDA DE NO RUIDO EN LAS RUTAS DE BUSES Y LA ANIQUILACION DEL CONCEPTO DE DISCO MOVIL EN LAS UNIDADES DE TRANSPORTE COLECTIVO.
ME IDENTIFICO CON EL DOCTOR OSEGUERA CON LO RELATIVO A LA SALUD Y PROLIFERACION TOXICA PRODUCIDAS POR CHATARRAS AMENAZANTES A LA SALUD HUMANA.
Jose Matatias Delgado Y Del Hambre.